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Numeral 62
Esta maternidad de María en la economía de gracia perdura sin cesar desde el momento del asentimiento que prestó fielmente en la Anunciación, y que mantuvo sin vacilar al pie de la cruz hasta la consumación perpetua de todos los elegidos. Pues, asunta a los cielos, no ha dejado esta misión salvadora, sino que con su múltiple intercesión continúa obteniéndonos los dones de la salvación eterna [186]. Con su amor materno se cuida de los hermanos de su Hijo, que todavía peregrinan y hallan en peligros y ansiedad hasta que sean conducidos a la patria bienaventurada. Por este motivo, la Santísima Virgen es invocada en la Iglesia con los títulos de Abogada, Auxiliadora, Socorro, Mediadora [187]. Lo cual, embargo, ha de entenderse de tal manera que no reste ni añada a la dignidad y eficacia de Cristo, único Mediador [188].
[186] Cf. Kleutgen, texto reformado De mysterio Verbi incarnati, c. 4: Mansi, 53, 290. Cf. San Andrés Cret., In nat. Mariae, serm. 4: PG 97, 865A. S. Germán Constantinop., In annunt. Deiparae: PG 98, 321BC. In dorm. Deiparae, III: 361D. San J. Damasceno, In dorm. B. V. Mariae hom. 1, 8: PG 96, 712BC-713A.
[187] Cf. León XIII, enc. Adiutricem populi, 5 sept. 1895: AAS 15 (1895-96) 303. San Pío X, enc. Ad diem illum, 2 febr. 1904: Acta I, p. 154; Denz. 1978a (3370). Pío XI, enc. Miserentissimus, 8 mayo 1928: AAS 20 (1928) 178. Pío XII, mensaje radiof., 13 mayo 1946: AAS 38 (1964) 266.
[188] San Ambrosio, Epist. 63: PL 16, 1218.
Jamás podrá compararse criatura alguna con el Verbo encarnado y Redentor; pero así como el sacerdocio Cristo es participado tanto por los ministros sagrados cuanto por el pueblo fiel de formas diversas, y como la bondad de Dios se difunde de distintas maneras sobre las criaturas, así también la mediación única del Redentor no excluye, sino que suscita en las criaturas diversas clases de cooperación, participada de la única fuente.
La Iglesia no duda en confesar esta función subordinada de María, la experimenta continuamente y la recomienda a la piedad de los fieles, para que, apoyados en esta protección maternal, se unan con mayor intimidad al Mediador y Salvador.